Una de las razas de perros más populares y buscadas en la actualidad es el Bulldog Francés. Sin embargo, las personas no pueden llevar un perro a casa solo porque está de moda. En este sentido, puede resultar muy útil saber antes cómo es tener a un Bulldog Francés de mascota.
La mayoría de las personas eligen a sus mascotas según sus preferencias o conveniencia, sin tener en cuenta las características físicas y conductuales que puede tener el animal, las cuales, sin lugar a dudas, pueden afectar a la relación y convivencia con todos los miembros de la casa y otros entornos.
Y aunque el Bulldog Francés sea una raza de perros que está de moda, y todo el mundo desea tener, la verdad es que es un animal que requiere ciertos cuidados y atenciones fundamentales para su bienestar y salud, tanto física como emocional. Por tal motivo, hablaremos sobre cómo es tener a un Bulldog Francés de mascota.
Cachorros criados en entornos familiares
Hoy en día, es fácil encontrar en excelentes condiciones un cachorro de Bulldog Frances exotico, en cualquiera de sus tipos, ya sea un Blue, Blue Merle, Black, o tono chocolate. Todo gracias a la dedicación que ponen los criadores exclusivos de la raza en México, quienes ofrecen garantías no solo de la pureza del animal, sino también de parte de su comportamiento.
Esto lo hacen posible por medio de la mezcla de ejemplares con las mejores cualidades físicas y de comportamiento de la raza, lo cual permite que las camadas conserven todos los rasgos que han hecho tan famosa y querida a la raza de los Bulldog Francés.
De este modo, son capaces de entregar cachorros sanos, felices, con una estructura y temperamento ideales para integrar en la familia, puesto que los criadores ya los han acostumbrado a estar en ambientes familiares.
Un perro pequeño que se adapta a cualquier espacio
Lo primero que se debe saber del Bulldog Francés, es que pertenece a la categoría de perros de raza pequeña, pues su cuerpo es compacto aunque un poco robusto, con el hocico corto y la cabeza ancha. Pero lo que más destaca de ellos, son sus orejas alargadas, parecidas a las de los murciélagos. Dependiendo del sexo, los Bulldog Francés pueden pesar entre los 8 y los 14 kilos aproximadamente, y su pelaje es corto y liso.
Todo ello permite que los perros de esta raza se puedan adaptar a la perfección a cualquier tipo de espacio, ya sea un apartamento o una casa. De igual manera, por su tamaño, las personas pueden cargar con ellos cómodamente, en bolsos o casetas para mascotas, y llevarlos de vacaciones o allá donde deseen.
Comportamiento de los Bulldog Francés
A pesar de que la mayoría de las veces, las personas priorizan el tamaño al momento de elegir una mascota, la verdad es que el factor más importante a tener en cuenta cuando se lleva un animal a casa, es su comportamiento, ya que esto es lo que puede determinar la armonía e interacción con los dueños, así como con las demás personas y otros animales.
En el caso de los Bulldog Francés, se debe tener en cuenta que son perros bastante amigables, juguetones y muy leales, por lo que son perfectos para tener en hogares con niños, o como mascotas para personas que valoran la compañía constante de un perro, ya que estos no se separan de sus dueños ni un instante.
Cuidados especiales para los Bulldog Francés
El Bulldog Francés pertenece a la raza braquiocefálica, debido a rasgos tales como los agujeros de la nariz estrechos, la tráquea más larga y el velo del paladar con mayor longitud, siendo esto lo que les produce los ronquidos tan peculiares al respirar. Debido a esto, es necesario cuidar la intensidad de la actividad física a la que se somete el perro, ya que pueden sufrir dificultades para respirar.
Por último, es importante tener en cuenta que, por lo apegado que son con sus dueños, lo mejor es evitar dejarlos solos por períodos prolongados, puesto que suelen desarrollar ansiedad por separación.