La Navidad es el periodo del año en que la iluminación artificial se convierte en un recurso protagónico alrededor de todo el mundo. Las luces de navidad son un símbolo cargado de reminiscencias al pasado y a la tradición. Sin embargo, la evolución tecnológica y creativa de esta industria ha permitido alcanzar posibilidades inimaginadas orientadas al ahorro, la responsabilidad medioambiental y la seguridad.
A pesar de que su adquisición ha estado asociada a la importación, hoy resulta tremendamente fácil encontrar un mayorista y fabricante de luces LED de Km0. Acceder a un catálogo diverso y creativo da pie a grandes posibilidades decorativas, tal y como explican en Ocio real. Descubre los beneficios de optar por guirnaldas LED, ¡estos son los beneficios de esta tecnología!
Reducidos niveles de consumo
Los ratios de consumo son considerablemente inferiores. Se les atribuye un 90% menos que a las luces incandescentes. Además, su nivel de emisiones es un 80% inferior. Su eficiencia energética y su reducido coste convierten a las luces LED en la alternativa más asequible y ecológica que existe en la actualidad.
Una extensa vida útil
Uno de sus rasgos más característicos es su larga vida útil. Frente a las 1.000 horas de vida efectiva que poseen las luces clásicas incandescentes, las luces LED llegan a superar las 50.000. Esta variable las convierte en una alternativa aún más económica porque su ahorro también se manifiesta en sus reducidas necesidades de renovación.
Por otro lado, su larga vida útil no sólo se registra a través de su efectividad en el tiempo, sino también su capacidad de adaptación. Su configuración está conceptualizada para asegurar su resistencia. Las bombillas LED pueden implementarse en entornos sometidos a temperaturas extremas. Es su perdurabilidad lo que las convierte en la alternativa generalizada durante el invierno, especialmente en fechas especiales como la navidad.Balcones, calles, jardines o terrazas. Las luces LED pueden funcionar correctamente durante los meses más fríos manteniendo sus potencialidades durante varios años. Gracias a la robustez de sus mecanismos, la humedad, los entornos térmicos extremos o incluso los impactos no minimizan sus capacidades ni reducen su período de vida útil.
Además, las luces LED cuentan con una capacidad para emitir más luz que sus predecesoras. El resultado son entornos iluminados con mayor intensidad y nitidez. Lo mejor de todo, es que su rango de potencia no se ve minado o reducido fruto del desgaste por el paso del tiempo. A lo largo de toda su vida útil sus capacidades se estabilizan manteniendo su potencia hasta el final de su período de uso.
Una inversión a largo plazo
El precio de compra de las luces LED es el doble de las incandescentes. Sin embargo, gracias a su reducido consumo, su perdurabilidad o su resistencia, su adquisición se convierte en una inversión amortizable y una fuente de ahorro a largo plazo.
Una oferta diversificada
Dentro del mercado de luces LED existe una enorme diversificación. El auge y la generalización de su consumo ha derivado en un segmento próspero e innovador en el que es posible encontrar una infinita variedad de alternativas. Hoy es posible encontrar opciones de diferentes estilos, tamaños y funcionalidades: Bombillas clásicas, figuras en miniatura, copos de nieve, guirnaldas…
Esta innovación continúa creciendo, no sólo desde el punto de vista creativo, sino también, desde la perspectiva técnica alcanzando unos niveles de interacción elevados. En el mercado existen sistemas de iluminación LED programables y regulables a distancia, a partir del uso de aplicaciones móviles.
Cuentan con un gran valor ecológico
Optar por una solución LED significa apostar por una alternativa más ecológica y respetuosa con el medio ambiente. Su capacidad para reducir el consumo ayuda a ahorrar recursos a largo plazo minimizando no sólo las cuotas de consumo sino también, las necesidades de producción. No obstante, sus repercusiones también tienen un efecto directo dentro del entorno doméstico porque al calentarse menos que las bombillas incandescentes, son menos propensas a generar accidentes e incendios.