A nuestras mascotas podemos darles diferentes tipos de alimentación, pero la más cómoda es la seca, la que se conoce como pienso que además es la más limpia y la más cómoda para nosotros.
Los piensos secos para perros y gatos, como piensospopas, se elaboran de una manera determinada que garantiza un resultado óptimo, con unos ingredientes de calidad para nuestros mejores amigos.
La selección de ingredientes es la clave
Como ocurre cuando cocinamos un plato para nosotros, todo empieza eligiendo los ingredientes que tienen que ser de la mejor calidad para que el resultado final sea óptimo.
La comida para mascotas de mala calidad usa ingredientes como los picos de las aves, las patas, pezuñas de ovejas, etc., desperdicios que les salen muy económicos. Por el contrario, en los piensos de calidad se usan ingredientes que cumplen las normas para consumo humano.
Se procesan los ingredientes
Una vez que se han elegido los ingredientes comienza el procesado. Aquí se pesan y se mezclan, siempre en las mismas proporciones para que el pienso no cambie de un lote a otro.
Bien mezclados los ingredientes se muelen y aquí es cuando las marcas les añaden los minerales y las vitaminas que lleva cada una de sus presentaciones, para a continuación hacer lo que en la industria llaman el “pre-acondicionado”, amasando la mezcla hasta que queda homogénea.
El extrusionado le da la apariencia que todos conocemos al pienso
El pienso de perro y de gato tiene una apariencia que todos conocemos y que varía según las marcas y el tamaño del animal al que vaya dirigido.
La clásica forma de bola se la da un proceso llamado extrusionado que consiste en pasar la mezcla que hemos visto en el paso anterior por un molde a alta presión.
Aún necesita varios procesos antes de que nuestro perro se lo coma
Cuando termina el extrusionado del pienso ya tiene su forma, pero ahora está muy húmedo. De esta forma, hay que secarlo para bajarle la humedad en una proporción que va del 3 al 12 % dependiendo de la presentación y de la marca.
De hecho, además del extrusionado, la mayor diferencia entre el pienso seco y la comida húmeda es la humedad, ya que la segunda tiene un porcentaje de humedad que comienza en un 60 %.
Esta comida húmeda es más apetecible para nuestras mascotas, pero es más cara, más difícil de almacenar y se conserva durante mucho menos tiempo.
Una vez que la humedad baja se le aporta aceite y grasa, pues una vez seco no es demasiado apetecible, para enfriarlo como paso final antes de envasarlo en los sacos que son los que nos llegarán a casa y que se venden con diferentes pesos, más pequeños para animales de tamaño pequeño y más grandes para perros de buen tamaño.
Hay muchos tipos de presentaciones, pero podemos encontrar sacos que van desde los 400 gramos a los 15 kilos, aunque nuestra recomendación es comprar siempre sacos pequeños (a no ser que tengamos un perro de raza gigante), para no almacenar la comida durante mucho tiempo. El pienso seco se conserva muy bien, pero notamos que las bolas no están igual al abrir el saco que pasadas unas semanas.